
Distinguir entre un vino de calidad y uno común es una habilidad fundamental para cualquier novato en el mundo del vino. Sin embargo, no es exclusiva de expertos sumilleres ni mucho menos. Solo requiere un conocimiento básico para comenzar. En este artículo, exploraremos las directrices para identificar las características de un vino de calidad.

Como distinguir si un vino es de calidad o no
Al igual que con cualquier experiencia de vida, a medida que explores diversos vinos y sus sabores, desarrollarás una capacidad más aguda para distinguir entre lo bueno y lo malo.
Sin embargo, si consultas a un experto en enología, probablemente te ofrecerá una serie de criterios a considerar:
- Su armonía y equilibrio.
- El matiz y la intensidad de su color.
- Los matices aromáticos que desprende.
- La estructura y cuerpo de la bebida.
- Su perfil de sabor.
Como puedes observar, evaluar la calidad de un vino implica involucrar los cinco sentidos. Pero, ¿Qué hacer si deseas determinar la calidad de un vino sin necesidad de catarlo?

Determinar la calidad de un vino basándose en la etiqueta.
Simplemente con fijarte en la etiqueta del vino en cuestión también podrás saber si es bueno o malo.
Para ello, tienes que fijarte en como está escrita la etiqueta y la información que aparece.
Por ejemplo, si en la etiqueta aparece la información de productor, importador… significa que estamos ante un buen vino. Aquellos que esconden estos datos bajo palabras como alegre, sencillo o majestuoso, entre otras, no tienen tanta categoría.
Por otro lado, todos aquellos que tienen el sello de denominación de origen, ya te aseguran una calidad reconocida. También puedes observar que tipo de uva tiene, si es 100% de una variedad (bueno), o tiene más de 3 variedades (no tan bueno).
Como ves, solo la etiqueta nos da mucha información, pero deja que te diga que con un vistazo a la botella también podrás saber si un vino es bueno o malo.

¿Cómo discernir la calidad de un vino a través de la botella?
Entiendo que pueda sonar extraño, pero hay aspectos de la botella de vino que también pueden indicar su calidad.
En primer lugar, es comúnmente aceptado que los vinos envasados en tetra brik suelen ser más adecuados para cocinar que para disfrutar con una comida.
Además, el grosor del vidrio de la botella puede ofrecer pistas sobre la calidad del vino. Las botellas con vidrio más grueso suelen asociarse con vinos de mayor calidad.
Incluso el color oscuro de la botella, casi negro, puede indicar que estás frente a un vino de calidad superior.

¿Cuáles son los elementos que distinguen a un vino de calidad?
Sin embargo, la calidad de un vino no se limita solo a su etiqueta o envase, sino también a una serie de aspectos que marcan la diferencia en su cultivo y elaboración.
El terruño: El tipo de suelo en el que se cultivan las uvas es fundamental. Desde arcillosos, pedregosos, calcáreos, arenosos, hasta volcánicos o de pizarra, cada tipo de suelo aporta características únicas a las uvas. Esto se refleja en la graduación alcohólica y otros aspectos del vino.
El clima: El clima influye significativamente en la calidad del vino. Tanto la temperatura como la latitud, humedad, y la cantidad de lluvia o sol tienen un papel crucial. Los climas fríos tienden a producir vinos con mayor acidez, mientras que los cálidos suelen ser más suaves.
Tipos de uva: Los vinos tinto y blanco se distinguen por el proceso de fermentación de las uvas. El color del vino proviene de la piel de las uvas utilizadas. Además, dentro de estas categorías existen numerosas variedades de uva, cada una con sus propias características.
Elaboración y crianza: El proceso de transformar las uvas en vino implica una serie de pasos, desde el prensado hasta la fermentación y crianza. La elección del recipiente y el tiempo de envejecimiento (joven, crianza, reserva, gran reserva) afectan al resultado final del vino, incluyendo su sabor, aroma y textura.

Recomendaciones
Mi gusto por el vino se ha ido desarrollando a lo largo del tiempo, como un viaje sensorial en el que cada copa es una nueva experiencia. Entre todos los vinos que he probado, hay 5 que siempre destacan por encima de los demás:
Pyros Limestone Hill Malbec: Este Malbec exhibe un profundo color púrpura y aromas intensos a frutas rojas y especias. En boca, ofrece un cuerpo generoso con taninos suaves y sabores complejos de moras y cassis, complementados por un distintivo toque mineral. Es una experiencia sensorial que captura la pasión y la tradición vitivinícola de Argentina en cada sorbo.
DON Escorihuela: Es un vino de calidad premium que representa la excelencia enológica de Bodegas Escorihuela Gascón. Este vino, elaborado con uvas seleccionadas de los mejores viñedos de Mendoza, encarna la tradición y la pasión por la viticultura que caracteriza a la bodega. Con una cuidadosa elaboración y un proceso de crianza en barricas de roble, Don Escorihuela ofrece un perfil de sabor sofisticado y elegante, destacando por su equilibrio y complejidad. Es una experiencia que refleja el legado de excelencia de Bodegas Escorihuela Gascón, celebra la calidad y la autenticidad de los vinos de Mendoza.
Alma Negra Blanco: Es un vino cautivador que desafía las convenciones. Producido por Alma Negra Wines en Mendoza, este vino blanco es una expresión audaz y moderna de la región. Elaborado principalmente con la variedad de uva Torrontés, este vino ofrece un perfil fresco y vibrante con aromas intensos a flores blancas, frutas cítricas y hierbas aromáticas. Alma Negra Blanco es más que un vino; es una experiencia sensorial que despierta los sentidos y celebra la innovación enológica de Argentina.
Rutini Chardonnay: Es un vino de la bodega Rutini Wines. Elaborado en la región vitivinícola de Mendoza, este Chardonnay es un ejemplo de la calidad y la elegancia que caracteriza a los vinos blancos argentinos. Con una cuidadosa selección de uvas y un proceso de vinificación meticuloso, este vino ofrece un perfil fresco y equilibrado. Rutini Chardonnay es una opción excepcional para quienes buscan disfrutar de la refinada sofisticación de los vinos blancos argentinos.
Luigi Bosca Rosé: Es un vino argentino que encarna la frescura y la elegancia de la región vitivinícola de Mendoza. Producido por la reconocida bodega Luigi Bosca, este rosado es una expresión sofisticada y vibrante de la uva Malbec. Su sabor es refrescante y equilibrado, con una acidez vibrante y una textura suave y sedosa en boca. Perfecto para disfrutar en cualquier ocasión, Luigi Bosca Rosé es una opción deliciosa para quienes buscan explorar la diversidad y la calidad de los vinos rosados argentinos.

Con estos conocimientos básicos que hemos compartido contigo, la próxima vez que te enfrentes a una selección de vinos, podrás examinar las botellas y leer sus etiquetas para evaluar la calidad del vino que contienen.
Ten en cuenta factores como el tipo de uva, la ubicación del viñedo, la cosecha, la denominación de origen, y otros detalles relacionados con su elaboración y crianza. Sin embargo, evita dejarte llevar por prejuicios; por ejemplo, el hecho de que un vino haya sido envejecido en barrica en lugar de en tanque de acero inoxidable no necesariamente indica una calidad superior.
Una vez que el vino esté en tu copa, los criterios a considerar se basan en tus sentidos. El equilibrio es fundamental; debe haber armonía entre el dulzor, la acidez y el alcohol, sin que ninguno domine sobre los demás.
Además, se valora el cuerpo del vino, es decir, si cada sorbo pasa sin dejar una impresión duradera o si se puede apreciar su carácter distintivo. También es importante prestar atención a los matices en boca y los detalles aromáticos, los cuales pueden revelar mucho sobre su proceso de elaboración, especialmente en vinos afrutados.